La reclusión perpetua de los misioneros Jesuitas expulsos mexicanos en conventos Extremeños (1775-1786)
Resumen
La Pragmática Sanción de Carlos III que expulsaba del Imperio Español a todos los jesuitas de sus dominios en 1767, tuvo una cruel excepción. Una treintena de misioneros jesuitas que trabajaban penosamente en las regiones más extremas (norte de Nueva España y sur de Chile) fueron encarcelados en conventos de diócesis del interior de la Península Ibérica, cuyos obispos eran los más serviles de la política regalista del poder madrileño. Fueron auténticos rehenes, puesto que nunca fueron juzgados ni se formuló acusación alguna contra ellos. Se sospecha que el principal motivo era el temor de que pudiesen transmitir información a potencias extranjeras enemigas, como Inglaterra. En el presente estudio, nos fijamos en los cinco misioneros mexicanos que sufrieron prisión y murieron en conventos de la diócesis de Plasencia (Cáceres).
Palabras clave: Misioneros expulsos mexicanos, Carlos III, diócesis de Plasencia, Maneiro, Félix Sebastián.