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Escenario económico
Luis Vicente León
Bueno, primero que todo encantadísimo de estar aquí y pues muchísimas gracias
por permitirme compartir un poco nuestra visión sobre el entorno venezolano, ya la parte
más importante la desarrolló José Antonio con profundidad, yo solo quisiera dar algunos
matices en el tema, específicamente económico ¿Qué es lo que estamos esperando
hasta la fecha?
Para poder hacer esa primera proyección y construir un poco los escenarios, vale
la pena entender qué hay hoy aquí, es obvio que tenemos una crisis, es tan obvio que el
69,5% de la población siente que la situación económica y política del país es negativa.
Entonces, no hay un debate sobre si estamos en crisis o no. Puede haber un debate
sobre quiénes son los responsables, pero, crisis hay.
Bueno, esta crisis es evidente en la mayoría de los indicadores económicos
fundamentales. Estamos hablando de la inflación más alta del mundo en este momento,
59,4% acumulado de inflación y eso porque el Banco Central no ha publicado la data de
abril, que todos sabemos que es 5,7% y que va a acumular 62% en 12 meses al momento
que se publique.
Tenemos un problema crítico de desabastecimiento, el Banco Central lo ubica en
su nivel histórico más alto. Pero si tú le metes una lupa y chequeas cual es la escasez
de productos alimenticios regulados en la ciudad de Caracas que infinitamente es mejor
abastecida que el resto del país, ese nivel ubica el 10 de marzo 60% de escasez. Y vale
la pena decir que eso no significa que el anaquel esté vacío en 60% porque Venezuela
es un país completamente esquizofrénico donde tú no consigues leche pero hay
champaña, no hay pollo pero hay punta trasera argentina o black angus americano sin
mayores complicaciones, al menos en Caracas.
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En esta combinación tan rara estamos hablando de lo que falta, es lo esencial, es
complicado conseguir aceite, leche, azúcar, café, mayonesa, margarina, pollo, allí está
el grueso del problema. La pregunta es ¿Por qué? Si le preguntamos al presidente
Maduro nos dirá que todo esto es culpa de una guerra económica de algunos factores
que intentan hacer un golpe de estado, construyendo la escasez mediante el
acaparamiento, la especulación, el contrabando de extracción y la corrupción de las
divisas. Vale la pena decir que cada una de esas cosas que el presidente Maduro dice
que ocurren son absolutamente ciertas, no cabe duda que el país no requiere los setenta
y dos mil millones de dólares que se gastó en el año 2012 para importar mercancía. Todo
eso es verdad, lo único que le falta a esa historia es que todo eso es culpa de ellos, es
el resultado natural de una estrategia de control de cambio, de precios, de empresas,
que se traducen en estímulos distorsionantes que en la economía son absolutamente
imposibles de evitar.
Si vendes dólares a 6,30 bs por dólar y el mercado negro es a 75, no te quepa la
menor duda que es un estímulo para que la gente agarre dólares de 6,30 y lo venda a
75 de manera directa en el mercado negro o indirectamente en la formación de los
precios.
Hay dos tipos de crisis, la de choque interno y externo. Una crisis por choque
externo ocurre porque cae el mercado petrolero, cae el precio del petróleo o su venta en
el mercado. No depende de ti, quizás ni siquiera es culpa tuya. En el caso de la economía
venezolana es obvio que un choque externo petrolero es híper impactante. Ahora si tú
chequeas la data de producción y de precios de petróleo hoy, la respuesta es que no hay
una crisis de choque externo. No hay una caída de ingresos petroleros que puedan
justificar la magnitud de la crisis que se vive hoy.
Entonces ¿Cuál es el otro tipo de crisis? Una muy rara para Venezuela, es una
crisis por choque interno, es rara porque incluso siendo muy mala, porque cuando no
hay choque externo normalmente limpias tus errores con el chorro petrolero que entra,
que si estamos en choque externo, no existe. Entonces tú tienes plata que limpia tu error,
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si un colombiano comete un error en política económica lo paga a diez años, los peruanos
a quince, los venezolanos lo pagan al día siguiente con petrodólares.
Ahora, aquí tenemos una crisis de choque interno, lo logramos, finalmente
pudimos superar la meta. Esto significa que es tan malo el modelo económico que logró
destruir la economía, incluso repleta de divisas.
¿Dónde está la crisis? Lo podríamos resumir en un cuadrilátero perverso, que lo
conforman cuatro patas: el control de cambio, de precios, expropiaciones improductivas
y la ley de trabajo. Cuatro elementos que impiden el desarrollo de la economía hoy. El
pecado original es el mercado cambiario, porque si yo me paro aquí en la Universidad
Católica a vender dólares a 6,30 Bs, ofrezco 100 mil dólares a 6,30, la cola va a ser
infinita; no es que los necesites ahora pero yo te los estoy regalando. Hay un híper
estímulo a la demanda de divisas, que es igual que un hiper estímulo a la demanda de
importaciones porque el único bien barato que tienes en la economía es el dólar a 6,30
y cualquier cosa que con él hayas comprado. Bueno, de allí en adelante el problema
básico de la economía está explicado.
Si tú estás híper estimulando la demanda de divisas, simplemente no hay divisa
que aguante; Alemania no tiene suficientes euros para regalarlos, Estados Unidos no
tiene suficientes dólares para regalarlos. Entonces no es un problema de la generación
de divisas de la nación, es un problema del precio de venta, si las regalas recibes una
demanda infinita y si las regalas tienes que tomar decisiones discrecionales y en su
reparto entra la corrupción e ineficiencia.
No es la corrupción de este gobierno, ni chavista, la corrupción es hija de los
estímulos de una conducta inadecuada que lo acepta tutirimundachi. Déjenme decirle
que el SITME hizo rico a bolichicos, amiguitos míos, suyos, que detestaban a Chávez, a
Maduro y a toda su compañía.
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Tú repartiste dólares a 5,30 y hay un montón de gente que se hizo rica si
conseguía divisas a ese precio. No tenía que ser chavista, tenía que ser un actor capaz
de conseguir por cualquier vía un dólar, que entonces no era 5,30 sino que además
pagabas para que te los pagaran y eso llegaba a 7, luego lo terminabas vendiendo en el
mercado negro. Es un estímulo imposible de resolver, excepto devaluando, reconociendo
el valor real de esa moneda, pero hay un segundo problema con esa misma
sobrevaluación del tipo de cambio, es muy simple, PDVSA es el único que genera divisas
aquí, es el único que genera divisas realmente relevantes en la nación y vende el 93%
hoy a 6,30 y a 11 bolívares por dólar. Con una inflación de 60%, vende los dólares a 6,
pero tiene que pagar a los trabajadores, las misiones y los proveedores.
Imagina que viene un pana tuyo de Estados Unidos y tú lo atiendes aquí en Puerto
Ordaz, le das vueltas, lo llevas para los Castillos de Guayana, le das vueltas en lancha
saliendo del Ítalo y el último día el tipo te quiere hacer una atención así que se van a
cenar, cuando llega la cuenta y el tipo saca la tarjeta de crédito del Bank Of América para
pagar la cena con una tarjeta gringa a 6,30 Bs por dólar, bueno, eso es más caro que el
Eleven Madison Park en Nueva York y más barato que un McDonalds a 75, entonces
hay un arco – reflejo del venezolano cuando tú ves a aquel pobre hombre sacar la tarjeta,
le dice “¿Tú eres loco? ¿Cómo tú vas a pagar eso a 6,30? Si me quieres hacer una
atención véndeme los dólares pero no los tires así a la basura”.
PDVSA todas las mañanas saca su tarjeta de crédito y le paga a los trabajadores,
proveedores y las misiones a 6,30. Entonces ¿Es que no tiene divisas? ¿Es que hay un
colapso de las exportaciones? ¿Es que estamos quebrados porque mantenemos a
Cuba? Vale la pena decir que en efecto mantenemos a Cuba, y estoy en contra de que
la mantengamos, pero tú prendes Cuba completa desde las siete de la mañana hasta las
siete de la tarde y gastas menos energía que la ciudad de Barquisimeto. Entonces ¿Es
bueno que lo mantengas? No, pero eso es igual que tu cuñado que vive en tu casa, se
bebe tu whisky, se come tu comida, te ruletea tu carro y te pide plata para bonchar. Ahora
¿Te da arrechera? Sí, pero ¿Tú estás quebrado por él? No, esa no es la razón, la razón
es que como a PDVSA no le alcanzan los bolívares a 6,30 se tiene que voltear a pedirle
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al Banco Central que le financie un déficit fiscal de 16%. Y cuando se lo financia lo hace
creando bolívares, haciendo crecer la liquidez monetaria en más de 30% real después
de la inflación. Y cuando metes toda esa plata allí sin que haya bienes ni servicios en
contra peso llega la inflación y el desabastecimiento. Allí está la guerra económica.
Maduro te dice que cuando sale la leche para Cúcuta y la señora se compra la
leche a precio regulado con un tipo de cambio absurdo se la compra al 10% de lo que le
sale a ella en el mercado de Cúcuta, en realidad esa señora no está actuando
racionalmente sino que es un comando antirrevolucionario organizado por el presidente
Uribe, no es que esté comprando la leche barata.
Los bachaqueros maracuchos son una especie de comando antirrevolucionario
camuflado en manta guajira, no unos señores que compran barato un bien en el
supermercado y salen a venderlo más caro con todas las mujeres desesperadas que no
consiguen el producto.
Estamos hablando de nuevo de la distorsión generada por el control. No hay forma
que tú controles la inflación controlando los precios, los controlas produciendo más,
invirtiendo más, estimulando los procesos productivos. La oferta es la única que resuelve
el problema de los precios, no su control.
Al final llega a lo que está ocurriendo hoy, se regula el precio de los carros que no
hay y ahora va a regular el precio de los pasajes aéreos que tampoco hay. Yo recuerdo
cuando estaba chiquito en Tovar en el estado Mérida, había una escasez de huevos,
llegó la señora de servicio diciendo “Doña, doña, allá en San Francisco los huevos están
a medio - ¿No me trajiste? – No, es que no hay”. Puede estar a locha, a puya, puedes
hacer un decreto de que los huevos son libres, el rollo es que no hay. No puedes controlar
los precios de un bien que no estás produciendo porque no tienes los estímulos de la
producción.
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La expropiación, que afortunadamente el gobierno del presidente Maduro ha
paralizado, no es un tema ideológico, es un tema empírico. Expropiaste la cementera y
no hay cemento, las productoras de café y no hay café, no hay azúcar, expropiaste
SIDOR y tú me dirás dónde está. No te conviene porque no hay forma de que tú
mantengas los procesos productivos bajo ese esquema, eso no quiere decir que una
empresa del Estado en un momento determinado no pueda ser muy eficiente.
Finalmente la ley laboral genera una carga de inflexibilidad que hace imposible a
las empresas operar porque tú estás simplemente creando unos monstruos, si tú tienes
una inamovilidad laboral que no sea numérica sino individual, lo que estás haciendo es
que hay un montón de malandros protegidos por la ley, no el 100% de tus trabajadores,
pero los malandros están protegidos por esa ley, igualito que quien no lo sea, por lo tanto
no hay ninguna forma de resolver el problema porque te acompaña una incapacidad de
adaptarte a los procesos productivos o al mercado, con lo cual no hay forma de crecer
en términos de producción.
Bajo ese esquema que hay y ¿qué ha hecho el gobierno? La dirección de
respuestas ha sido correcta, el gobierno de Maduro ha, implícita e indirectamente,
reconocido lo que yo estoy diciendo, ellos saben lo que está pasando, y las acciones se
han tomado en la dirección correcta. Si analizas la despenalización del mercado
cambiario, que el presidente Maduro comienza ofreciendo tan pronto es elegido, eso es
una decisión en la dirección correcta.
La creación de SICAD II para buscar un mecanismo de evaluación, aunque fuera
implícita, sin contarle a la gente que iba a devaluar, eso es una acción en la dirección
correcta.
Las negociaciones de precios con las empresas de consumo masivo que han
permitido desplazamientos del 100%, 200% y 300% en azúcar, en harina de maíz
precocida, son acciones en la dirección correcta.
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La modificación de la ley de centros comerciales que se negoció en la mesa de
diálogo es una decisión en dirección correcta ¿Cuál es el problema? Que la dirección es
correcta pero a velocidad de morrocoy mientras la crisis va a velocidad de gacela.
Entonces, si tú quieres unas acciones que se demoran meses para tomar, cuando el
propio gobierno reconoció la necesidad de aplicarla. Entonces surgen algunas dudas
¿Cuándo te va a explotar la crisis completamente en la cara? Aun cuando tú sabes que
viene la crisis y sabes que tienes que actuar, ¿Cuánto vas a esperar antes de que te
explote? Si la decisión del presidente Maduro está tomada ¿Por qué la implementación
del SITME y por qué demora tanto?
¿Tiene realmente el presidente Maduro el margen de maniobra para tomar
decisiones difíciles en materia económica en este momento? Es obvio que tiene mucho
menos margen de maniobra que Chávez, su capacidad para pedir al pueblo que
postergue ratificaciones y su control interno del chavismo es más bajo y finalmente hay
estímulos dentro del aparato estatal para impedir los cambios que se requieren porque
reducen el arbitraje cambiario y el contrabando de extracción del cual mucha gente vive
bastante bien, con lo cual esas limitaciones obligarán a que la crisis se profundice aún
más antes de que esa dinámica obligue al gobierno a tomar decisiones mucho más serias
o drásticas en materia económica que, en mi opinión, de todas maneras vendrán.
