17
Foro Guayana Sustentable. Revista Informativa de Investigación Nº 18
- La convicción del conocimiento necesario, la obra de los jesuitas:
las misiones jesuitas se extendieron desde el alto Orinoco hasta el río
Cuchivero, y la ocupaban al margen derecho del río. Los jesuitas
conocían el valor del relato geográfico, realizaron y publicaron
descripciones lo más fidedignas posibles de los territorios recién
conocidos, comprendieron la importancia de la comunicación con los
aborígenes así que valoraron las lenguas nativas y documentaron su
existencia. El mundo comenzó a conocer una Guayana más real
documentada con rigor geográfico.
● La fiebre del oro a mediados del siglo XIX, El Dorado, parte II:
- Durante el siglo XIX la frontera se tornó móvil y las líneas de
demarcación con la Guayana Británica comenzaron a seguir el
descubrimiento de nuevas minas, jalonando el tránsito de las
corrientes de aventureros en búsqueda ansiosa de riqueza fácil.
- La concreción de un polo de desarrollo Ciudad Guayana y su
hinterland, las minas de hierro, la producción energética con fines
industriales, la siderúrgica, la reducción del aluminio, el
descubrimiento de la bauxita, el abastecimiento energético nacional,
Uverito, el aspirado desarrollo agrícola en el Delta.
● El arco minero del Orinoco. El Dorado Parte III.
- La minería no es problema técnico, ni siquiera ambiental, es
político, socioambiental, psicosocial, psicopatológico.
- Guayana es una oportunidad para recrear la Venezuela del futuro.