Y eso significa que hay que bombear y ¿dónde está la energía? aquí, con
la hidroelectricidad, y si no la utilizamos, tenemos que quemar gas o vamos a
quemar petróleo para llevar el agua para el norte. Pero hay un famoso proyecto
que muchos conocen, el Proyecto Orinoco Apure, ahí estaba la solución, pero
¿cuánto cuesta crear un puesto de trabajo en la línea del Proyecto Orinoco
Apure?, ¿tiene el país los recursos para crear esos proyectos?, además ¿hemos
acumulado todo el conocimiento necesario para desarrollar ese proyecto?. El
Ministerio del Ambiente, quien se lo planteó, nunca pensó que ese proyecto se
iba a materializar en tan corto plazo, lo pensó como se los estoy proponiendo
yo, que hay que pensar en el desarrollo de Guayana, un proyecto de visión 100
años, 150 años, no un proyecto de visión de 20 años.
Hay que cerrar el ciclo de nutrientes. Caramba, cerrar el ciclo de nutrientes
significa usar las aguas servidas, ni siquiera tenemos sistemas que reúnan y
conduzcan todas las aguas cloacales de una ciudad a un sitio, a un punto, donde
haya un sistema de aguas de tratamiento; pero es que, además, si vamos a reusar
el agua para la agricultura, está bien, no vamos a eliminar el nitrógeno y el fósforo,
porque eso lo queremos como fertilizantes para la agricultura para cerrar el ciclo,
pero tenemos que eliminar los patógenos, tenemos que tratar y eliminar todos
los patógenos que tienen las aguas residuales para poder usar en la agricultura,
y podríamos decir, bueno podemos utilizar con riego vegetales de porte alto,
por ejemplo, regar naranjas, lechosas, regar frutas, pero el problemas es ahora,
tenemos que desarrollar toda la tecnología que nos asegure los operarios, las
personas que riegan y las frutas que se generan no van a tener ningún tipo de
contaminación. Entonces no es tan sencillo, digamos, es posible pero requiere
mucha ingeniería. Lo otro es el cambio de las fuentes de energía que ya tratamos.
Estas son mis propias acotaciones, los límites se han superado, por la
propensión humana a la búsqueda del bienestar, es decir, no hay una maldad
implícita del hombre y eso es bien importante reconocerlo para fijar los límites
éticos, no podemos decir las generaciones pasadas fueron intrínsecamente malas
en su relación con el ambiente, no podríamos decirlo incluso de civilizaciones que
se perdieron. Hemos creado el mito del buen salvaje, hay muchas cosas, sabemos
científicamente que existieron civilizaciones americanas que desaparecieron como