94
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
Activismo Ciudadano y Democratización
Citizen Activism and Democratization Omar Alcalá
Fecha de recepción: 14-09-2020 Creemos Alianza Ciudadana
Fecha de aprobación: 30-09-2020 Iniciativa del Centro de Estudios
Políticos y de Gobierno, UCAB.
oraspzo@gmail.com
Resumen
El presente trabajo tiene como propósito presentar algunas reflexiones, desde lo particular a lo
general, y algunas consideraciones sobre el papel de la sociedad civil y la ciudadanía en un tema
tan importante como es el inicio de un proceso de transición democrática en Venezuela, haciendo
hincapié en la necesidad de una participación activa del ciudadano como sujeto político
generador de cambios, conocer parte del tablero político actual, en la cual se está moviendo el
régimen autocrático y algunos análisis importantes para ser considerados en el tema de la
organización cívica para la construcción de una agenda común de todos los actores que procuran
una democratización del país.
Palabras clave: sociedad civil, ciudadanía, transición democrática.
Summary
The purpose of this work is to present some reflections, from the particular to the general, and
some considerations on the role of civil society and citizenship on such an important issue as the
beginning of a process of democratic transition in Venezuela, emphasising the need for the active
participation of citizen as a political subject that generates change, knowing part of the current
political board on which the autocratic regime is moving, as well as an important analysis to be
considered in the civic organization topic for the construction of a common agenda for all actors
seeking democratization in the country.
Keywords: civil society, citizenship, democratic transition.
INTRODUCCIÓN
El papel de la sociedad civil y los ciudadanos como conjunto de actores organizados, es
de gran importancia para un proceso de transición democrática y por supuesto en la
consolidación de una democracia que perdure en el tiempo y que no tenga retorno a regímenes
autoritarios, ésta amerita de un elemento formativo que pueda incidir en la calidad de todo este
proceso. Entendiendo que la transición recae en la clase política pero que no son los únicos
responsables de este proceso y que tampoco son los únicos sujetos organizados que expresan la
voluntad popular en la situación de la gobernanza política, para esto es necesario fomentar una
cultura democrática generando alianzas con varios actores de la sociedad y elaborar agendas que
permitan elevar una cultura democrática en el sector social y político de la nación.
95
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
Más allá del escenario actual del tablero político del país y que en el pasar del tiempo,
puede ir modificándose con resultados cada vez más catastrófico como lo reseñan los últimos
datos de ENCOVI, queda la responsabilidad de frenar esta situación tan compleja con alianzas
entre la clase política y el sector social para definir la mejor estrategia de acuerdo a las mejores
evidencias científicas en temas de transición democrática, que generen menos costos y riesgos,
que permitan dar gobernabilidad y estabilidad a la nación y refundar el sistema democrático con
la legitimación de las instituciones del poder político de la nación.
Corresponde a los ciudadanos de manera individual reflexionar sobre un cambio positivo
en la actitud de una conducta proactiva en el activismo ciudadano que necesita el país para
elevar el nivel del debate y de la acción estratégica en la búsqueda de alternativas políticas a la
crisis de Venezuela.
ACTIVISMO CIUDADANO Y DEMOCRATIZACIÓN
Inicio estas líneas para la temática de democracia y ciudadanía, haciendo una reflexión a
partir de la siguiente pregunta: ¿cuáles han sido los aciertos y desaciertos en mi ejercicio de la
ciudadanía?
Respondo a esta pregunta desde mi vivencia como persona nacida en democracia y que
vivió una buena parte de ella. Creo que no todos los ciudadanos que vivimos en Venezuela,
incluyéndome, tuvimos alguna práctica elemental de lo que es formación cívica o ciudadana y
que para los que ejercían la institucionalidad del Estado, en los cuarenta años de democracia
desde 1958 a 1998, no era un asunto de mucho interés para el país, ni la formación ciudadana, ni
su práctica, a pesar de que desde 1958, de acuerdo con Salamanca (2003), los ciudadanos y la
sociedad civil han recorrido un largo proceso de reconocerse y ser reconocidos como sujeto
político, donde los partidos políticos juegan un papel importante, pero no son los únicos sujetos
organizados que expresan la voluntad popular en la situación de la gobernanza política. Dicha
reflexión pasa también por recordar el ejercicio del voto electoral, que desde la primera vez que
lo ejercí hasta la actualidad, pude comprender que la democracia no se suscribe única y
exclusivamente en el voto o en la elección de un gobernante.
De lo antes expuesto quiero aclarar, que ha sido un largo proceso comprender éste y otros
asuntos ligados a la democracia y a la ciudadanía. Todo inicia básicamente cuando asumo, de
96
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
manera personal, una conducta más proactiva de activismo ciudadano, para cumplir con el deber
constitucional y cívico de procurar el rescate de la institucionalidad democrática, entendiendo
que como ciudadano y reconociéndome como sujeto político, de deberes y derechos, había
perdido el poder de elegir y sobre todo de vivir en democracia. Dicho proceso se da con mi
participación en un pequeño movimiento estudiantil universitario (1996), en ser luego delegado
industrial en un sindicato de profesionales y técnicos de una empresa básica de Guayana
(SUTRAPUVAL, 2007), en el acercamiento a mi gremio (2014), en la participación de las
protesta cívicas(2016), en la participación en los debates de política en grupos de opinión (sector
social) y luego en algo que valoro mucho, la formación académica, realizando el Diplomado de
Gobernabilidad, Gerencia Política y Gestión Pública (Centro de Estudios Políticos y de Gobierno
CEP&G- UCAB, 2018), así como otros estudios ligados a la temática de este ensayo, incluyendo
docencia (Componente docente, CIAP-UCAB, 2021). Todo esto lo expongo con el propósito de
elevar la conciencia de aquellos ciudadanos desmotivados, apáticos, desentendidos de la política
nacional y que evaden la responsabilidad del activismo ciudadano, entendiendo que, si no
iniciamos un proceso de activismo ciudadano responsable y nos quedamos esperando que otros
hagan lo que nos corresponde hacer a nosotros, la situación actual del país se va a ir
profundizando de manera catastrófica, sin olvidar que estamos en momentos muy complejos para
todos los venezolanos. Esto, sin dejar de reconocer todo el esfuerzo que ha hecho la sociedad
venezolana en el pasado para recuperar la democracia, pero entendiendo que dicho esfuerzo debe
mantenerse en pie de lucha hasta lograr el cambio y la consolidación de una democracia. El
activismo ciudadano es un proceso continuo que procura mejorar la democracia, en nuestro caso
es para procurar una democratización del país.
De todo esto he comprendido también, que el momento actual amerita que los
ciudadanos venezolanos y la sociedad civil, busquemos las alternativas políticas a la crisis de
Venezuela, que pasa por elevar la actuación de los líderes sociales y políticos, el reconocimiento
de ambos, comprender dentro la problemática social, la forma de cooperar en aliviar las
necesidades de los sectores más vulnerables y construir una estructura social que permita
coordinar, con aquellas organizaciones no gubernamentales, el tema de la emergencia
humanitaria compleja, así como también programas para la formación de los líderes de base en
temas de liderazgo y activismo, derechos humanos, el estudio y la comprensión de la lucha
97
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
cívica no violenta y por supuesto la articulación de todos los actores civiles, que logre aglutinar
una gran fuerza ciudadana que haga contrapeso al poder constituido en el régimen autocrático
más allá de la esfera de poder de las instituciones del estado.
De acuerdo con Magdaleno (2021), uno de los desafíos que tiene la sociedad venezolana
y los ciudadanos, dentro y fuera de Venezuela, es estimular el inicio y desarrollo de una
transición a la democracia, teniendo en mente el objetivo de lograr su exitosa instalación,
estabilización y consolidación. Según Pinckney (2020), entendiendo que existen algunos factores
que pueden inhibir una eventual transición democrática y que no vamos a profundizar en esta
ocasión, más allá de esos factores que existen, hay lecciones claves para procurar una transición;
acción no violenta contra regímenes criminales, momentos clave más allá de elecciones,
combinación de movilización y negociación, construcción de movimientos ante la ausencia de
momentos clave.
Este desafío que debe lograr la sociedad venezolana para un proceso de transición
depende, en gran medida, del compromiso individual de cada uno de los ciudadanos con dicho
proceso, de la convergencia de las fuerzas democráticas, del compromiso honesto y sincero de
los líderes sociales y políticos que permita una coalición que sustente un programa viable y
acertado por las partes. Comprendiendo que las transiciones hacia la democracia son prolongadas
y son negociadas o pactadas, explícita o implícitamente. Bitar (2019), señala que la negociación
o pacto necesita de una fuerza democrática sólida, movilizada y combativa. Sin ellas, no hay
negociación ni pacto, todas tienen altibajos y siempre ocurren hechos no previstos.
Ahora, para emprender una alternativa política a la crisis venezolana y el inicio de un
proceso de transición hacia la democracia, se debe tener un poco claro el tablero político actual,
ya que, de acuerdo con Terán (2019), en el periodo 2013-2019 exist una maduración de la
crisis venezolana, atravesando intensas luchas por el poder (en sus múltiples escalas), un
aumento de la internacionalización del conflicto político, un peligroso proceso de
descomposición de la política promovida, en gran medida, desde el régimen autocrático, que da
lugar a una característica del grupo que ostenta el poder político tipo mafia o de gánster, con
dominio económico que da concesiones para la cohabitación con algunos adversarios en la acera
opositora, logrando en su estrategia la fragmentación del bloque político democrático y de la
sociedad civil en su accionar.
98
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
Venezuela en el año 2014, se caracterizaba por ser un régimen híbrido (combinación de
elementos democráticos y autocráticos, que adoptan la forma de democracias populares, con
instituciones que maquillan su carácter autoritario) ocupando la posición 100 del índice de
democracia publicado en el 2015 por The Economist Intelligence Unite, con un puntaje general
de 5,07. A partir del 2017, el régimen de Nicolás Maduro, se desplaza hacia un régimen
autoritario (sistema donde se impone el poder de quien lo ejerce, en ausencia de la construcción
de un consenso participativo, que origina un orden social opresivo, carente de libertad o
autonomía) bajando a la posición 117 en el ranking del índice de democracia, con un puntaje
general de 3,87 y para el 2020 desciende a la posición 143 con un puntaje general de 2,76 de
acuerdo al índice de democracia de la revista The Econ omist Intelligence Unit 2020.
Este modelo autoritario, de acuerdo con Terán (2019), viene presentando una menor
dependencia de los recursos derivados de las actividades económicas, productivas de bienes y
servicios de sus ciudadanos, sino que depende en la actualidad del extractivismo (economía
ilícita) de los recursos naturales (oro, coltán, torio, diamante), por lo que presenciamos la
formación de un extractivismo de trincheras, de posiciones, de feudos, en el cual grupos del
sector militar, gobiernos locales (alcaldías, gobernaciones, etc.), la criminalidad organizada,
grupos armados para-estatales de diverso proceder (nacional e internacional), conforman poderes
particulares (dependiendo del territorio donde se desenvuelvan) y tienen como botín los recursos,
los territorios y la población. Por tal motivo, no existe el interés, del grupo que ostenta el poder
político, en buscar caminos de negociación con los sectores productivos de la sociedad civil y
que mejoren las condiciones económicas del país, agravando la emergencia humanitaria
compleja. Esto, de igual manera, mantiene cerrada una negociación con el sector democrático, ya
que en los actuales momentos no están dadas las condiciones necesarias (no existe una amenaza
que ponga en riesgo la estabilidad del poder) que coloquen en un dilema de seguir resistiendo o
de negociar la salida del poder, esto solo cambiaría si desde la sociedad civil y desde la
responsabilidad del deber ciudadano generamos las condiciones.
Otro elemento que no se puede obviar, en el análisis del tablero político actual, según
Alarcón (2021), es la estrategia que la ha dado resultados últimamente al gimen autoritario de
Nicolás Maduro, que consiste en el diálogo, la represión y elecciones controladas. La estrategia
de la Mesa Nacional de Diálogo, que permitió dividir a la oposición haciendo concesiones a
99
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
algunos actores que fueron cooptados por el régimen en 2020, seguirá presente en el escenario de
este año y enfocada a diferentes actores con el mismo propósito.
Por otra parte, de acuerdo con PROVEA (2019), en el año 2019 se registró un total de
5211 víctimas de violaciones a la integridad personal, de las cuales 574 fueron víctimas de
torturas, 852 fueron víctimas de tratos y penas crueles, inhumanas y degradantes, muriendo 57 de
ellas en estos actos, además 1033 personas fueron heridas durante el año, de las cuales 984 de
ellas mientras participaban en manifestaciones, todo esto producto de la represión por parte de
los cuerpos de seguridad del estado en contra de los reclamos ciudadanos.
En adición a esto, en un informe presentado por Human Rights Watch, en diciembre
2020, señala que Las autoridades venezolanas acosan y persiguen penalmente a organizaciones
de la sociedad civil que llevan a cabo la tarea esencial de responder a la emergencia humanitaria
en el país. Desde noviembre de 2020, las autoridades venezolanas que responden a Nicolás
Maduro y sus fuerzas de seguridad han llevado a cabo una campaña sistemática contra
organizaciones humanitarias y de derechos humanos que trabajan en el país, que ha incluido
congelar sus cuentas bancarias, emitir órdenes de detención y allanar sus oficinas, además de
detener a algunos de sus miembros para interrogarlos. A su vez, las autoridades bancarias están
aplicando restricciones que limitan el trabajo de las organizaciones de la sociedad civil, y el
gobierno no ha brindado los permisos necesarios para que personal internacional pueda ingresar
en Venezuela a algunas de las principales organizaciones humanitarias”.
Por otra parte, en un reporte especial, publicado en diciembre 2020, IPYS Venezuela
advierte que las agresiones y ataques, el abuso del poder estatal, y las restricciones de acceso a la
información pública hacia periodistas, medios de comunicación y ciudadanos, marcaron las
violaciones a la libre expresión e información entre los meses de julio a diciembre de 2020
Señalado en dicho reporte, las agresiones y amenazas, el abuso del poder estatal y las
restricciones de acceso a la información de interés público fueron los mecanismos de censura que
más coartaron el ejercicio del periodismo en Venezuela durante los últimos seis meses de 2020.
Así lo evidenció el sistema de monitoreo y alertas del Instituto Prensa y Sociedad de Venezuela
(IPYS Venezuela), que totalizó 141 casos de violaciones a los derechos de libertad expresión e
información de los periodistas y ciudadanos, de acuerdo con los 12 indicadores definidos por
Voces del Sur.
100
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
Los hechos más graves en estos meses fueron los asesinatos a los comunicadores, José
Carmelo Bislick y Andrés Eloy Nieves Zacarías, en los estados Sucre y Zulia, respectivamente.
También hubo un intento de homicidio y de secuestro contra el reportero gráfico Jamel Louka en
Guárico. Destacaron además las detenciones arbitrarias, que totalizaron 17 casos en los que se
vieron afectados 23 trabajadores de la prensa.
Estas restricciones en la labor periodística se dieron en un contexto de crisis profunda de
derechos humanos que afec a todo el país debido a las precariedades en el acceso a los
servicios básicos como la electricidad, el agua, el gas y la gasolina, entre otros, y a este escenario
se suma la situación de emergencia sanitaria causada por la pandemia de la Covid-19. Desde que
se decretó el Estado de Alarma en Venezuela el 13 de marzo de 2020, han aumentado las órdenes
de silencio y los impedimentos para que la prensa venezolana ejerza su derecho de informar,
investigar, opinar e incluso preguntar sobre asuntos de relevancia social.
Otro elemento a destacar es el hecho de que para el régimen de Nicolás Maduro,
mantener el control total del CNE es prioritario para la realización de elecciones controladas y
hechas a la medida del régimen para asegurarse el poder.
Como lo expresé anteriormente, los venezolanos debemos generar un cambio en nuestra
actitud para elevar la conciencia ciudadana hacia un activismo proactivo y comprometido, en la
procura urgente de una democracia, porque el país lo reclama a gritos. Quiero traer a colación la
historia del vuelo 571 del año 1972 que se estrelló en la cordillera andina Chilena, vivida y
contada por Carlos Páez (sobreviviente del siniestro reo), donde todo comenzó como algo
normal (el viaje) y terminó en una situación desastrosa, esa es la descripción propiamente dicho
del vuelo siniestrado en los andes, pero que comienza con otra historia que es la de sobrevivir a
ese siniestro, la actitud de todos los sobrevivientes en la cordillera era una actitud de espera, por
una solución que llegara del exterior (ser rescatados), hasta que se percatan un día (día 10
después del siniestro) escuchando la radio que tenían, que la búsqueda por encontrar al avión
siniestrado había cesado, después de haber escuchado esa amarga noticia, ellos entendieron que
era la oportunidad de un cambio de actitud, ese día se pasó de sobrevivientes a pasar a vivir, el
concepto, definido por Carlos Páez, se traduce en que el sobreviviente es aquel que está
esperando que lo vengan a buscar, pero cuando uno se convierte en el timonel de su propio
destino la historia cambia, y ese día la historia cambio. La vida del continente suramericano
101
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
continuaba y ellos se encontraban atrapados en esa cordillera andina con situaciones extrema
para poder vivir, algo difícil de entender, pero para analizar desde el punto de vista del caso, es
que el camino va por uno y no por lo que le pase a los demás. Es allí donde comienzan a
organizarse realmente para poder salir de los andes y tomar decisiones duras como alimentarse
de los cuerpos de sus compañeros ya fallecidos.
Algo que es digno de analizar de este caso, es el trabajo en equipo, la toma de decisiones
duras para avanzar en el plan, la solidaridad, la fraternidad, el amor, el aprendizaje y hacer
pequeñas grandes cosas que dieron sentido a ese esfuerzo para salir de esa grave situación. Una
de las grandes proezas de esta historia fue la actitud y la determinación de las personas de este
relato, donde pudieron decir “Si” al “No”, luego de todo esto lograron en 72 días salir de la
cordillera chilena, a más de 11.800 pies de altura.
Los venezolanos tenemos nuestra propia cordillera, que no podemos esperar que nos
vengan a salvar, que depende de nosotros y de nuestro cambio de actitud, pasar de
sobrevivientes a vivir para conseguir el camino hacia la democracia, que tenemos que trabajar
organizados como un gran equipo, que vendrán decisiones difíciles y duras pero que hay que
asumirlas, que los días serán también muy fríos como la cordillera, que todos servimos para salir
adelante ante esta situación como un gran equipo, con un liderazgo por mayoría, con pasión y
que a pesar de las equivocaciones del camino podemos llegar al sitio propuesto.
Quiero dejar en este escrito una reflexión de Carlos Páez que me llamo la atención en su
relato y hace referencia a una frase de San Francisco de Asís que dice: empieza a hacer lo
necesario, luego lo que es posible y terminarás haciendo lo imposible. Eso fue básicamente lo
que hicieron Carlos y sus compañeros para poder vivir y lograr salir de esa situación catastrófica
como lo cuenta en su relato, que este referente nos sirva en los pequeños detalles que amerita la
lucha democrática. En Venezuela, la esperanza no ha muerto. Son muchas las personas,
organizaciones, instituciones, empresas que sueñan con un país alternativo. Hay una Venezuela
subterránea que no se cansa de levantarse todos los días para luchar por una Venezuela
alternativa. (Virtuoso, 2021).
102
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
Con estas palabras del padre Francisco Virtuoso quiero ir finalizando este escrito,
llevando un mensaje de fe y esperanza para todos los venezolanos que están dispuestos a seguir
luchando, sin desmayar, por generar las condiciones para una transición a la democracia, pero
sobre todo hacer un llamado de conciencia de participación de todos los venezolanos por la causa
democrática, que el esfuerzo de los sectores sociales y políticos permita darle dirección política a
la alternativa democrática, que se logre capitalizar en el horizonte, el cambio político que la
nación necesita, pero sobre todo entender que hay muchas razones éticas para utilizar la
estrategia de la lucha no violenta, para poder conseguir ese cambio, que de acuerdo a la
investigación científica realizada por la politóloga de la Universidad de Harvard, Érica
Chenoweth, confirma que la desobediencia civil no es solo una opción moral, sino que también
es la forma más poderosa de dar forma a la política mundial.
Las protestas no violentas tienen el doble de probabilidades de éxitos que los conflictos
armados, y las que se enfrentan a un umbral del 3,5% de la población movilizada, nunca han
dejado de lograr un cambio. De acuerdo con Magdaleno (2020), esta estrategia es la ideal para
procurar una transición negociada, que es el mejor camino, porque toleran los menores costos y
riesgos, y aseguran la perdurabilidad y calidad de la democracia.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
BBVA. (20 de mayo 2020). V. Completa. Accidente en los Andes: una historia
extraordinaria de supervivencia. Carlos Páez. Youtube:
https://www.youtube.com/watch?v=kcTyn5OShcE
Bitar, S. (2019). Venezuela: ¿qué salida del laberinto? Búsqueda de alternativas políticas
a la crisis de Venezuela. Seminario Internacional. (185 198). Abediciones
Centro de Estudios Políticos y de Gobierno. (2018). La consolidación de una transición
democrática. el desafío venezolano III. Abediciones
Chenoweth, E. & Stephan, M. (2012) Why Civil Resistance worjs. New York. Columbia
University Press.
Human Right Watch. (Diciembre 2020). Venezuela: Ataques contra organizaciones
humanitarias. Disponible en: https://www.hrw.org/es/news/2020/12/21/venezuela-
ataques-contra-organizaciones-humanitarias
103
Guayana Moderna 09.
Año 2020
ISSN: 2343-5658
IPYS. (Diciembre 2020). Reporte Especial IPYSve | Seis meses de agresiones y abuso de
poder. Disponible en: https://ipysvenezuela.org/2020/12/28/reporte-especial-
ipysve-seis-meses-de-agresiones-y-abuso-de-poder/
Magdaleno. J. (Febrero de 2021). Work Café. CEP&G (Centro de Estudios Políticos y
Gobernabilidad). Caracas, Venezuela.
Pinckney, J. (Octubre de 2020).Conferencia para Creemos Alianza Ciudadana. Instituto
de Paz de los Estados Unidos. Washington D. C. U.S.A.
PROVEA. (2020). Informe Anual | Situación de los Derechos Humanos en Venezuela |
Enero Diciembre 2019. Disponible en:
https://provea.org/publicaciones/informes-anuales/https-provea-org-wp-content-
uploads-securepdfs-2020-12-09salud-pdf/
Salamanca, L. (2003). “La sociedad civil venezolana en dos tiempos: 1972-2002”.
Politeia, 30
Terán, E. (2019). Venezuela: Extractivismo predatorio y política del saqueo. América
Latina en movimiento. Disponible en: https://www.alainet.org/es/articulo/201603
The Economist Intelligence Unit . Democracy Index 2015: Democracy in an age of
anxiety. Disponible en:
https://www.eiu.com/public/topical_report.aspx?campaignid=DemocracyIndex20
15
The Economist Intelligence Unit. Democracy Index 2020. In sickness and in health?
Disponible en: https://www.eiu.com/n/campaigns/democracy-index-2020/
Virtuoso, J. (Marzo de 2021). Entrega Premio Valores Democráticos. Caracas. Venezuela